Hola
familia,
Hoy son ya 7 meses desde mi última entrega...
De verdad que como pasa el tiempo y lo más importante no es tanto
lo rápido que pasa, sino lo que sucede en ese tiempo...
Por un lado cosas buenas, y como es lógico, también
pasan cosas malas, aunque ahora que lo digo, creo que el mal o el bien,
solo es cuestión de opiniones, de creencias y hasta de moral
y educación, aunque claro que hay cosas que a todas luces siempre
estarán mal y las otras que estarán bien, pero siempre quedara
de una manera subjetiva y desde luego a la interpretación de
cada uno, o como aquella frase que le encantaba decir a mi adorada Madre:
En este
mundo nada es verdad, nada es mentira, todo depende del color del cristal con
que se mira ¿no
es verdad?
Por ejemplo, en nuestra entrega pasada, --la Virgen de la Soledad—en
la que que se armó tremenda polémica (que desde luego me encanta,
porque el propósito de todo este trabajo, es que
todos participen), entiendo que tuvo un impacto diferente al que pretendí
al crearla, y bueno, tengo que agregar que de repente mi estilo de escritura
divaga mucho, pero quiero que sepan que lo hago a propósito, sobre todo
cuando estoy nervioso, es decir, soy como los perros antes de acostarse a
dormir... Me gusta darle vueltas y vueltas, hasta que finalmente caigo
jajajajaj
Regresando un poco a lo de la entrega anterior, me llamo mucho
la atención, que lejos de conseguir el objetivo por el que fue
creada, (“recuperar la virgen de
la tía Carito”) conseguí ser enjuiciado --al menos por los
que comentaron en el blog-- y desde luego por algunos otros correos que me
llegaron, que por su naturaleza no quise incluir dentro de los comentarios.
Es curioso como
se puede desviar la atención de un hecho, a partir del surgimiento
del primer comentario, en donde lejos de considerar lo que la propia historia
narraba, se aludió a la manera en la que me referí a
mi primo...
Concedo la razón a todos aquellos que además de
sentirse ofendidos, me criticaron, y concedo la razón, porque todos tenemos el
mismo derecho a expresar nuestras opiniones, buenas o malas, es decir, el
derecho nos asiste a todos por igual, finalmente, reitero que mi único propósito
era el recuperar la virgen y no precisamente quemar a nadie...
¿Me equivoque?
Si... Todo parece indicar que por un lado, no
me correspondía hacerlo --aunque soy miembro de la familia y
creo que todos tenemos derecho a participar-- y por el otro, mi manera de
expresarlo resulto en la gran ofensa para el primo, a quien desde luego sí ofrezco una sincera disculpa; Alfredo, tienes razón de sentirte
ofendido, no era la manera de expresarme de ti, sin importar en este
momento, si lo que dije de tu persona es verdad o mentira, simplemente no fue la manera y por
ello te ofrezco la más amplia y sincera disculpa.
Por otro lado y, dejando un poco lo de la entrega anterior, empecé
comentando la velocidad con la que pasa el tiempo y la cantidad de
acontecimientos que suceden en este ir y venir de la vida diaria...
Para nadie es sorpresa que en abril pasado, sufrí mi
tercer infarto -- aprovecho para agradecer a todos los que me ayudaron, me
visitaron, me hablaron, me apoyaron, me llamaron y
escribieron dándome su cariño y sus mejores vibras para
mi pronta recuperación---
A TODOS MUCHAS GRACIAS!
Me queda claro que cada vez que he sufrido un infarto, mi vida ha dado
impresionantes giros y dejando como resultado importantes cambios...
En esta ocasión no fue la excepción, sin importar
los motivos, --aunque entiendo que para todos deben ser más que claros, es
decir, la lejanía de la familia es una factura con un costo muy
alto-- decidí dejar de trabajar en el negocio del sobrino al que
amablemente fui invitado a colaborar hace un poco más de 27 meses y regresar a
casa.
Hoy recibí un correo no muy agradable, en el que mencionaba cosas que nada tienen que ver con
mi decisión de dejar la mueblería, desde luego, no cita la
fuente por la que él se enteró, y también desde luego, para mí no
tiene la menor importancia toda vez que lo que le dijeron es falso, sin
embargo, me puso a pensar que así como a él le llego eso que no tiene el menor
sustento, dicen que del árbol caído todo mundo hace leña y con el propósito de
no crear chismes ni mayores especulaciones, decidí incluirlo en esta entrega
Deje el trabajo en Puebla, con la misma dignidad, humildad, educación y
agradecimiento al sobrino, con la que lo acepte cuando amablemente me
lo ofrecieron, mi trabajo siempre fue honrado y dedicado, en
cuerpo y alma, de tal suerte que sin importar lo que algunos pudieran pensar,
puedo garantizar que mi salida además de haber sido digna, fue sin prisa ni
pausa, sin arrebatos ni pleitos, lo hable con el sobrino en un restaurante en
donde amablemente me invito a comer y desde mi particular punto de vista,
se entendió y quedo claro el porqué de mi renuncia, lo que después
de esto pudiera surgir, son meras especulaciones, aquí lo realmente importante
es lo que él y yo hablamos ese día
Pero Felipe, ¿por qué nos cuentas todo esto?
Bueno esto obedece a que en principio, quise aclarar la razón de la entrega
de la virgen, quise también ofrecer disculpas al Primo Alfredo por lo que lo
haya ofendido, y también quise que quedara claro que mi regreso
de Puebla no obedeció a ningún pleito
ni mucho menos...
Siempre
será importante aclarar las cosas para que si de alguna manera como sabemos, la
historia nos va a juzgar, que al menos sea con la verdad y no con inventos o
calumnias que ni al caso...
¿Estamos de acuerdo?
Además
de que, imagina que acabo de pasar mi tercer infarto y no estoy cierto si
pudiera resistir el cuarto y eso de irme
sin dejar claro lo que pienso --sobre todo porque atañe a miembros de mi familia--
como que no me habría dejado descansar a gusto
Finalmente, esta entrega es algo que me estaba moviendo el corazón, y así como un día se
me ocurrió la idea de crear este maravilloso blog, que al día de hoy se ha convertido en un tesoro invaluable para toda la familia, --para los que hoy
estamos y para los que vienen después de nosotros-- tanto por sus contenidos
como por su archivo fotográfico o como la idea de
reunir a la familia, en un evento que estuvo cargado de magia,
en donde hasta los que por ya no estar entre nosotros, logramos que asistieran, y los que no
pudieron asistir, pudieron gozarlo a través de las entregas que se hicieron con
la reseña del evento, -- por cierto, antes de escribir esta entrega, vi otra
vez el vídeo del discurso y lo que paso durante y después de este y me volví a emocionar
tanto como lo hice ese día. Si hace tiempo que no lo ves, te recomiendo lo
hagas, es emotivo y nostálgico a la vez, te dejo el enlace, solo dale clik sobr el titulo y te abrira una nueva ventana con la entrega:
Hoy me queda claro que hubo un antes
y un después de este evento que nos hizo sentirnos lo que somos, es decir, nos
hizo sentirnos familia, nos unió como tal y que al día de hoy, me congratulo de
haber --entre todos--, logrado con ello, el que todos sepamos de todos, todos
nos conozcamos aunque sea en fotografía o por alguna entrega incluso, así como
por los lazos que se han creado entre algunos que estaban separados desde hace
años, ¿no es cierto?
Bueno pues hoy se me ocurrió el comentarles algo
que me preocupa, sobre todo, porque creo que no es válido juzgar a una persona
por una fotografía, y si de juzgarla se trata considero que debe hacerse
con la película completa...
Y después de lo que ha pasado a partir de la ultima entrega y luego con lo del infarto, no quiero que sea a la inversa, es decir, que todo este trabajo de unión, termine en una des unión.
Los invito a que le sigamos
dando continuidad a nuestro tesoro, enviando fotos, historias o lo que quieran
que quede grabado en la historia de las Familias de la Familia Morante Orozco,
recuerden que esto es para los que ahora estamos, pero sobre todo para los que
vienen debajo de nosotros y los que siguen y así hasta el infinito y más allá
Besos para ellas y abrazos
fuertes y cariñosos para ellos
Los quiero mucho!
Felipe Fernández Morante
saludos de pepita
ResponderEliminarHola Felipillo que gusto saber de ti, que tienes buena recuperacion....buen animo y claro! No te preocupes que todos estamos bien, piedritas en el camino no nos faltan a nadie. Ya te mandaremos fotos cuando tengamos algun eventillo y compartirlo, te quiero, xfa cuidate mucho y saludos a tus hijos y tocayita. un beso
ResponderEliminarBuenos días desde Azuqueca de Henares.
ResponderEliminarEspero que tu salud se mejore y puedas seguir dando alegrías a toda tu familia.
Un saludo y abrazos.
Miguel